lunes, 10 de mayo de 2010

Mientras mayo amanece...


Yo escribo canciones y me mutilo.
La glándula de la basura.
Los martillazos... son de acero, son de plata, son de bronce y plateado es el bigote que se mea en el jarrón de...uff. Quiero romper un jarrón en el borde del pantalón y fumar tranquila un cristal de aire.

Pibe...
De comerte tu miseria tus pulmones se acostumbran a respirar con dificultad (eso que los maricones llaman angustia) y te va dejando de importar que alguien te conozca en profundidad.
La única profundidad es la proyectada fuera del juego del amor y hambreada por el mismo juego.
Porque lo que parece real es un juego y lo que se presume personaje es lo más real, lo único que tiene peso y que es necesario desenvolver como una lenta coreografía hacia el final de la vida, hacia la vejez.
Lo que tiene peso no lo ve tu familia, no lo ve tu novia, no lo ve ningún amigo.
Lo ven los extraños.
Por eso, salvate de ese amor.
Tajeate ese amor.




Ximena